Y entonces llego a casa con un poco de tiempo de pensar cómo venían las cosas y me encuentro con mi otro yo. Si, el de uniforme verde. Me mira de arriba hacia abajo y me dice muy despectivo: "Vos, Hippie, tomátelas. Esto es un desastre, desde hoy mando yo".
Dictador: Y como cada tanto vuelve el TOC, me puse a ordenar los papeles de la facultad, a organizar la lista de pendientes, a organizar la lista de dependientes, a organizar la lista dependiente, y después pasé lista pero se ve que no había venido nadie, o al menos nadie que estuviera en la lista, porque cuando pregunté "¿a alguien no lo nombré?", flor de subversión y los mandé a sus casas, como al hippie ese que estaba dando vueltas por acá. Ejem, paso a informar:
- Levantarse temprano y comenzar a estudiar antes del trabajo.
- Acostarse temprano para poder cumplir con el punto anterior.
- Planificar efectivamente los tiempos.
- Conseguir una novia y solo una que esté en condiciones similares de tiempos y espacios.
- Fotocopiar y devolver los apuntes de Probabilidad y Estadísticas.
- Vender el equipo de bunjee jumping y con el dinero adquirir un bolso lleno de libros.
- Suspender la música y la guitarra.
- Respetar a los abogados que son seres correctos.
- Aflojarle a los postres, es decir, dieta balanceada, soldado.
- Preparar las materias para Mayo y Julio con el fin de evitar retrasos por régimen de correlatividades.
- Bañesé, sucio.
Y yo estaba rolando uno y vino este corta-flores y terminó con mi mundo, che!
Hippie: Nah, La posta del plan es que el ñato este se quede hasta que se le pase, que ordene todo, que gane platita, que me saque esas responsabilidades de encima y que cuando todo esté listo se vaya a dormir con "La casita en orden" mientras yo me como la cosecha. Imbécil.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario