¿Nunca les preguntaron si alguna vez alguien hizo algo de forma desinteresada por ustedes?
¿Alguna vez pudieron responder que si?
Hoy me mudé en el laburo. Cambié de equipo, oficina, escritorio (conservo la misma máquina por suerte). De verdad que es una gran oportunidad de cambiar apenas mi trabajo de todos los días, o en realidad, sumar tareas nuevas, incorporar nuevos conocimientos.
Mucha gente me acompañó durante toda mi vida. Muchos me han visto en el ámbito profesional, personal, laboral, etc. Muchos han ayudado, muchos han solo visto. Algunos han envidiado y otros tantos se han compadecido.
A todos ellos, les he agradecido infinidad de veces. Pero hoy quiero agradecerle a una persona que realmente me sorprendió mucho en los últimos tiempos. Una persona, cuya apertura de mente, me dió un lugar en su equipo, en su trabajo. Una persona de la cual aprendí, con la cual trabajé y con la que seguramente siga trabajando. Una persona que resignó la tranquilidad de tener entre sus compañeros a alguien que conocía su forma de trabajo, que estaba adaptado (es decir yo), simplemente porque sabía que la posibilidad que se me estaba brindando, estaba más acorde con mis objetivos, con mis gustos y con mi estado actual. Una persona que hizo algo bueno por alguien, tal vez hasta perjudicándose un poco, simplemente porque era lo que había que hacer, lo que estaba bien.
Una persona que actuó de manera desinteresada.
A usted, señor suicide, por enseñarme tantas cosas y por dejar que le enseñe tantas otras, este post, el dado y yo, le decimos MUCHISIMAS GRACIAS...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario