martes, junio 08, 2004

EVERYBODY NEED SOMETIME ALL ALONE

En base a una excelente noticia en el trabajo, se vino todo el replanteo. Ella no está más. Me duele, me cuesta, pero es la realidad. Estoy dispuesto a confrontarla, aceptarla y no pensar más en el porqué. Estoy dispuesto a dejar atrás el pasado aunque no esté del todo resuelto (este fue su consejo alguna vez). Entonces, reconozco, que me molesta muchísimo enterarme de esta buena noticia y mirar al costado y que no este ella a mi lado, para acompañarme, para compartir esto que me pasa. Para que sepa que considero que esto es muy importante, porque me proyecta en el tiempo y me dice, estás creciendo también en el ámbito profesional. Que no esté acá, significa exactamente que esta noticia es buena para mi y los que me rodean, pero que no es importante más que para mi. Que no le cambia la vida a nadie más que a mi.
Después de hablar con mi segunda madre, que siempre me dice lo mismo que me dice todo el mundo, y cosas que yo ya sé, pero que las dice de alguna manera que a mi me sirve más que cualquier otra, me tranquilicé. Realmente me di cuenta en que debo dejarla ir, como al resto de mi pasado, y dejarme ir, como siempre para mi futuro. Todos necesitan algún tiempo solos. Y tal vez yo en este momento también. El cambio radical se produjo en mi cuando me di cuenta que yo tampoco quiero estar con ella. Que muchos sentimientos siguen en mi, pero que el no ser correspondidos, hacen que yo quiera alejarme.

Hasta aquí, es lo que iba a ser el POST de ayer, que por estar muy cansado luego de pasar todo el día de un lado a otro (Laburo, Casa de Adil, Gimnasio, Casa), lo dejé en borrador hasta ahora.
Pero hoy el POST es distinto.

Quiero alejarme, olvidarme, matarla en mi alma. No quiero recordar algo en lo que creo, pero en realidad no es verdad. Yo pensé que me había extrañado, y que el problema era conmigo. Fue un error. Hoy cayó la ficha. No soy yo. Son ellos. Creo en la presencia de un tercero. Un pasado antiguo. Esto me lleva a una paradoja. Ella me recomendó, que no intentara siempre resolver mi pasado, que lo dejara ir. Eso es lo que ella hizo. Yo tengo ganas de hacer eso, dejar el pasado atrás aunque no esté resuelto. Pero el ejemplo no es bueno. Su pasado está otra vez aquí. Sea como sea, me voy. No estoy dispuesto a seguir a una persona que prefiere algo como eso. Esta vez, la decisión está tomada. Y es mía. Pensé que me había extrañado, que estaba por hacer una locura y llamarme, o escribirme. Me doy cuenta que en realidad estaba por hacer una locura. Lo estaba extrañando y estuvo por llamarlo. No lo hizo, se resiste. Pero tarde o temprano volverá a caer. Espero estar lejos cuando todo explote. No quiero estar en medio de asuntos de terceros (y reconozcámoslo, siempre hay terceros). Esta vez, el tercero soy yo.

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